Casi toda mi vida le tuve miedo a las grasas y las fritangas. De pequeña me encantaban las arepas de huevo, las empanadas y todo lo habido y por haber.
Cuando nos mudamos a Montana, tuve la oportunidad de servirle como chef privada a la famosa nutricionista Anne Louise Gittleman, de la clínica Pritiken.
Con ella aprendí que podemos tener una relación saludable con los aceites y las frituras, siempre que usemos grasas buenas para la salud.
Anne Louise me invitó a crear las recetas para su libro de cocina: ‘Eat fat, Loose Weight’. Te invito a leerlo.
Con eso en mente, diseñé estas frituritas de lentejas.
A través de Anne Louise aprendí sobre las grasas, las buenas, las malas y las peores. Conocí la omega 3,6 y 9, así como los beneficios de cada una cuando se usan con moderación. Hoy utilizo todo lo que aprendí de esta gurú de la nutrición y, a veces, frito.
Lo bueno de freír frente a saltear es que la comida entra y sale del aceite hirviendo en un instante, absorbiendo menos calorías de grasa y dando a la comida un agradable sabor y textura crujiente.
Me gusta usar aceite de cártamo. A diferencia de la mala reputación del aceite de canola, el de cártamo aún ofrece los beneficios de la cocción a alta temperatura sin agregar sabores adicionales a la comida, como es el caso del aceite de oliva. Esto es lo que dice Anne Louise Gittleman en su sitio web sobre el aceite de cártamo y si ayuda a perder peso: “¡Sí! De acuerdo con un estudio de la Universidad Estatal de Ohio, las mujeres posmenopáusicas que se suplementaron con 1 2/3 cucharadita de aceite de cártamo al día perdieron un promedio del 6,3 por ciento de su grasa abdominal en 16 semanas”.
Además, la investigación de seguimiento sugiere que la misma dosis de aceite de cártamo aumenta la sensibilidad a la insulina en un 2,7 por ciento, aumenta los niveles de colesterol HDL “bueno” en un 14 por ciento y frena la inflamación en un 17,5 por ciento en 16 semanas.
El mérito es de los ácidos grasos poliinsaturados en el aceite que aceleran la producción de adiponectina, la hormona quemagrasas. Sin embargo, es importante tener en cuenta que las grasas saludables del aceite de cártamo se descomponen cuando se exponen al calor y al oxígeno.
El aceite de cártamo en tus recetas favoritas puede ayudarte a adelgazar como tu amigo. Verás resultados más impresionantes si usas de 2 a 3 cucharaditas de aceite crudo en aderezos para ensaladas o rociado sobre vegetales diariamente. Por lo tanto, si deseas usar aceite de cártamo para bajar de peso, asegúrate de tomarlo crudo; de lo contrario, úselo como un aceite “bueno” para freír.
También me gradué de freír en mi caldero a freidora eléctrica. Es muy fácil de usar y muy fácil de lavar, pero la mejor parte es la canasta que recupera todos los pequeños bocados crujientes de alegría de una vez.
A eso llamo: ¡Sabrosura!
Ingredientes
- 1 taza de lentejas carmesí
- 1 taza de agua
- 1 cucharadita de sal
- 1 cucharadita de miel
- 2 cucharaditas de curry en polvo Madrás
- 1/2 taza de cebolla picada
- 1/2 taza de cilantro picado
- 1 cucharada de eneldo picado
- 3 tazas de aceite de cártamo, para freír
Direcciones
- Coloca las lentejas y el agua en un bol. Agrega sal y revuelve.
- Deja que la mezcla repose durante un par de horas. Las lentejas se rehidratan y absorben la mayor parte de la humedad.
- Coloca todos los ingredientes, excepto el aceite, en un procesador de alimentos y procesa hasta que se convierta en puré. No proceses en exceso, ya que no permitirá que los buñuelos se mantengan cuando los sumerjas en el aceite.
- Si usas una freidora, llénala hasta el nivel mínimo con aceite; si usas una olla, vierte las 3 tazas aceite de cártamo. Calienta a unos 365 grados.
- Con un plato de mango exprimible redondo #100, dale forma a los buñuelos y colócalo en el aceite hirviendo o dentro de la canasta de la freidora. Si no tienes un Disher, aunque te recomiendo que obtengas uno, usa dos cucharas. Una para recoger la masa y la otra para verterla en el aceite. Deja que se cocinen durante uno o dos minutos y dales la vuelta.
- Coloca en un colador forrado con toallas de papel.
Ingredientes para la salsa dipping
- 1/4 taza de tahini
- 1 cucharadita de curry de Madrás
- 2 cucharadas de mermelada de naranja cortada gruesa
- 1 cucharada de eneldo picado
- Exprimido de medio limón
- 1 cucharadita de Sriracha
Direcciones para la salsa dipping
- Coloca todos los ingredientes en un tazón pequeño y mezcla.
- Pon los buñuelos en una bandeja.
- Adorna con cilantro picado y rodajas de limón y una brocha de salsa Tahini-Orange Dipping.
Claudia Krevat es una chef colombiana, nacida en Barranquilla, residenciada en el estado de Montana desde hace más de 23 años.
Es chef y diseñadora de recetas, la mayoría de ellas basadas en leguminosas.